Arvo Pärt en Bellas Artes

Después de horas de espera, tristear por no tener boleto, odiar más que nunca la mafia de bellas artes y los malos tratos por parte de revendedores, el sábado 20 de Octubre se convirtió en uno de los mejores días en mi vida. Arvo Pärt siempre ha sido de mis compositores favoritos, lo admiro demasiado, conocerlo fue algo inequívocamente hermoso, el coro y la orquesta de Estonia rindieron un maravilloso homenaje, mantuvieron a todos inmersos en las 6 piezas que tocaron. Sublimes silencios, estructuras incitantes y sonoridades que hicieron temblar. Aún recuerdo la primera vez que escuché Fratres, me provocó un algo muy sensible en el alma. Lo logré, fui muy feliz.

Las 2 broke girls.

Empezamos como las morritas amargadas y hostiles en busca de sentido y estabilidad consigo mismas, con tanto en común y queriendo destruir el mundo.

Warriors con toda la voluntad de ser adultas.

Contigo cualquier cosa simple era una celebración, cosas como desde ir al supermercado para hacer la despensa con máscara de spiderman, aventar piedras a mirreyes que nos joden, huir de la policía, vivir en la azotea de un edificio de haitianos, el famoso ghetto, la adorable blanca, perdernos en lugares de mala muerte y salir vivas, reírnos de nuestra miseria y encontrar siempre soluciones. La música, caminar cantando, los libros, el Wonder Showzen, la jotería, el it crowd, los 90s, el master of disaster and the master of beat. 

Nuestra relación es lúdica, pasaste conmigo sucesos muy importantes, un año de vivir contigo fueron grandes historias, descubrimientos y apoyo incondicional.

Gracias por todo Charles, no pude haber encontrado mejor persona para compartir tantas cosas. Contigo crecí mucho. Eres la más fuerte.

Te quiero mucho, pequeña burócrata insolente.

Desde Reforma a Televisa

23 de Mayo 2012

21 de Mayo. Tlatelolco.

Elenita Poniatowska

“You once talked to me about love

and you painted pictures of a Never-Never Land.

And I could’ve gone to that place, but I didn’t understand…”

Journal.

Recuento del fin de semana: Una gran noche en el Cenart, canciones de Agustin Lara y terminar descubriendo a Dmitri Dudin, (un pianista ruso que me encantó) una chela en el centro acompañada de una pacífica lluvia con mucho viento, dejar que Pao me consienta, hot cakes y chocolate, unos vinos con Beto, que con la fortuna también es fan de Watchmen, visita de mi madre, la invité a subirnos al turibus con unos pases que me había regalado la UNAM, lagunilla, caminar y caminar, elote, palomitas, tacos de canasta, agua de sandía, Museo de Arte Moderno, encontré buenas obras, desde una que me llamó mucho titulada "According to google" toda una colección de imágenes, hasta una pieza sonora bastante evocadora de Manuel Rocha. Toda la tarde en la Biblioteca Vasconcelos fue una maravilla, libros de foto, pintura y Gerardo Deniz. Llegar al depa cansadísima y finalizar con un baño caliente.

Enero.

Fue un buen mes, incluso con éste frío rompehuesos; poder disfrutar mi soledad para ponerme a crear se ha vuelto cosa trascendente. Haberme decidido dejar los medicamentos (al fin) me ha hecho sentir más viva y con cierta autonomía, pues sentía un control imperecedero con tales cosas, la cosa ahorita es ganarle a su ausencia en mi cuerpo, pero, formalmente, pueden morder el polvo las benditas sustancias.

Por otra parte, una de las cosas más chingonas que pude haber vivido en este ciclo, fue conocer a Fred Kelemen, (mi cinefotógrafo favorito), de pura casualidad en la cineteca.

Ya he comprendido mucho mejor mi vida en calidad de estudiante, estamos ahorrando para poder comprar una mesa y unos bancos, surgió la idea de rentar el espacio que nos toca para poner coche, he de confesar que si he pasado días bastante difíciles, pero cualquier cosa sabe mejor después de la tempestad. Ya casi no visito a mi familia y extraño como nunca a mis gatos. 

Entre otras noticias, me invitaron a exponer el próximo mes. Ando seleccionando material, ahora concibo con mucha más seguridad mis tomas.